Técnicas distintas a la estimulación directa del pene que aumentan la excitación sexual física. Incluyen tocar zonas erógenas secundarias (pezones, ano, muslos, etc.), respiración profunda y enfocada (respiración de valle), el protocolo KSMO (Orgasmo Múltiple con Sonido Clave), contracciones sostenidas de los músculos del piso pélvico, enfoque mental y visualización. Cuando se usan hábilmente, conducen a un ciclo de mayor excitación que culmina en un orgasmo sin eyaculación.